El titular de la Agencia de Recaudación de la provincia de Buenos Aires, Iván Budassi, aseguró que el gobierno provincial va a “dialogar con el campo para avanzar en una solución” sobre la decisión de adelantar el vencimiento del impuesto Inmobiliario Rural bonaerense.
De acuerdo al esquema que publicó Arba en su página web, el pago del Impuesto Inmobiliario Rural debe cancelarse en el primer semestre del año -febrero, mayo y julio- cuando, históricamente, se pagó en marzo, julio y noviembre.
El funcionario precisó que “la modificación del calendario es una medida de carácter técnico a la cual le vamos a encontrar una solución política” y agregó: “Somos optimistas que, más allá del tono, alguna solución le vamos a encontrar”.
Budassi negó que la medida tenga que ver con un aspecto electoral y explicó que “es una cuestión meramente técnica de reestructuración de todo el calendario fiscal de Arba”.
Respecto del impuesto Inmobiliario Rural manifestó: “Lo que pretendíamos era ajustar los períodos de vencimientos a los ciclos productivos del campo”.
Y recordó que “de todo del ingreso que viene del Impuesto Inmobiliario Rural a la provincia, el 35% va directamente a los municipios y el otro 65% está afectado exclusivamente a obras viales e hidráulicas, no es que el gobierno lo puede gastar en lo que quiera”.
Explicó que “lo que sucede que nos cuesta cobrar la última cuota, que es la de octubre o noviembre porque los productores reciben su dinero de la cosecha en enero o febrero”.
“Lo que hicimos fue correr el último vencimiento, que es cuando el productor tiene el dinero en el bolsillo”, agregó y destacó que “por eso, es que se la tiró para adelante la cuota que vencía los primeros días de noviembre, para el mes de julio”.