El Centro de Economía Política Argentina (CEPA), publicó un informe en el que indica que el impacto de la sequía en un mayor faenado de ganado, la sostenida baja de consumo de carne y una menor presión de los precios internacionales del maíz favorecieron en los últimos meses un proceso de estabilización en el precio de la carne bovina.
Señala que, en los últimos cuatro meses, el incremento promedio de los cortes fue de 1,4% en junio, 0.0% en julio, 1,2% en agosto y 1,8% en septiembre. De acuerdo al Indec, la suba de precios de los alimentos fue muy superior en ese período: 4,6% en junio, 6,0% en julio, 7,1% en agosto y se estima en un 6% para septiembre.
“La evolución del precio de la carne vacuna se explica, en buena medida, por el efecto sequía, que mejora la oferta, la caída del consumo y por la situación internacional, donde los precios a la baja evidentemente influyen sobre el mercado loca”, expresa el trabajo.
En cuanto al nivel del consumo de carne bovina, el monitor ganadero anual de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), muestra que el consumo per cápita de carne vacuna continúa perforando el nivel histórico, situándose en septiembre en 46,7 Kg/hab/año.
Cabe agregar que en los últimos meses aumentó la oferta en faena (+8,5% en agosto en comparación a igual mes de 2021) y, en lo que va del año, el crecimiento acumulado es del 4,4%, totalizando 2.044.653 toneladas, 85.500 toneladas de carne más que las producidas un año atrás, algo que podría ser explicado por el efecto de la sequía.
“Sin embargo, noviembre y diciembre son meses donde suele aumentar el consumo, mostraron nuevamente incrementos sensibles en el precio de la carne promediando 11% y 10% respectivamente”, advirtió el trabajo del Observatorio de Precios del CEPA.
De cara a los próximos meses, el informe señaló que hay que “seguir de cerca” la evolución de la demanda china por un posible de consumo en ese país y del precio del maíz, ya que “la menor cantidad de maíz ofertado hacia finales de año suele generar presiones al alza de los precios de la carne”.
El rubro carne representa buena parte de los consumos de las y los argentinos, dado que su consumo representa, en la conformación del índice de precios al consumidor (IPC) entre 7% (GBA) y 13,3% (noreste) del total.