En una doble ceremonia realizada en la sede de SPI Astilleros, ubicada en el Puerto de Mar del Plata, se produjo el bautismo del buque pesquero “Luigi”, de la empresa Solimeno y la puesta de quilla del “Anita”, embarcación que SPI construirá para la misma compañía marplatense.

La jornada comenzó con las palabras de Antonio Solimeno en el marco de la ceremonia de bautismo del “Luigi”, el pesquero de mayor porte construido en el país.  

 “Quiero agradecer a todas las autoridades, a nuestra familia que siempre nos da apoyo y fuerza, a todo el personal de la empresa Solimeno e Hijos y del Astillero SPI y deseo éxito al buque y a su futura tripulación “, expresó el empresario.

A su vez, destacó que “hace 60 años que no se hacían barcos pesqueros con las dimensiones de estos buques, que son los más grandes que se construyeron en la Argentina, con la mejor tecnología de navegación y procesamientos. Estos barcos generan trabajo, mano de obra nacional y divisas para nuestro país” finalizó.

Seguidamente Gustavo Villén, en representación del Registro Italiano Navale (RINA), hizo entrega de una placa conmemorativa al titular de la empresa pesquera.

El encuentro continuó con la bendición del párroco de la Iglesia Sagrada Familia, Miguel Cacciutto, y con la tradicional ceremonia de rotura de la botella contra el casco de la nave, a cargo de la madrina de la embarcación, Anabella Solimeno y parte del equipo de SPI Astilleros que participó del proceso de construcción.

Puesta de Quilla del “Anita”

La ceremonia continuó con la puesta de quilla del buque pesquero “Anita”, de similares características que el “Luigi”, que se construirá en la nueva nave industrial y el sector de gradas de SPI.

En ese marco, la presidenta de SPI Astilleros, Sandra Cipolla, agradeció a la familia Solimeno e hijos por el esfuerzo y la confianza. “Aquel 18 de diciembre con la familia Solimeno hicimos la puesta de quilla en el Luigi con gran incertidumbre, pero estábamos dispuestos a soñar lo que hoy se materializa. Un sueño grande, inclusivo, que nos permitió seguir soñando. Hoy tenemos, además, al Anita”.

“En estos desarrollos, continúo, se refleja la ingeniería aplicada a la producción, la ingeniería trabajando para hacer realidad un sueño y eso realmente nos emociona porque lo hacemos con mucho trabajo, compromiso y esfuerzo”, agregó.

Cipolla sostuvo además que “con este tipo de embarcaciones y las que se hicieron en diversos astilleros de la Provincia y la Argentina, podemos dar cuenta de la importancia de la articulación público privada, la gran capacidad productiva que tiene nuestro país y la calidad de nuestros profesionales y trabajadores. Esto es posible gracias al esfuerzo que hace toda la cadena de valor naval y una empresa argentina, como Solimeno, que apuesta por el desarrollo de nuestro país”.

A continuación, honrando las tradiciones navales, se realizó la ceremonia de las monedas que consiste en la colocación de dos monedas en la quilla, siendo el más joven aprendiz del astillero el encargado de llevarla adelante. En esta oportunidad, Jonatan Ledesma recibió de los hermanos Solimeno las monedas y realizó la soldadura correspondiente, siendo otro de los momentos más emotivos de la mañana.

El evento contó la presencia de la familia Solimeno, el ingeniero Horacio Tettamanti, socio fundador de SPI, trabajadores de la empresa pesquera y del astillero marplatense, autoridades municipales, del Consorcio Portuario Regional Mar del Plata, de la Prefectura Naval Argentina, de la Universidad Tecnológica Nacional (UTN), legisladores municipales y provinciales, cámaras empresarias y sindicatos, entre otros.