Nos encontramos en la era de la industria 4.0 donde el ser humano ha comenzado a crear robots, drones, computadoras y, en general, máquinas que son capaces de “pensar” por sí mismas. Específicamente en el sector manufacturero se combinan TI y tecnología operacional para crear valor en nuevas y diferentes formas y así mejorar el flujo de información en las cadenas de producción.
Es importante entender que la seguridad juega un papel importante como eje rector para poder lograr la rentabilidad, productividad y competitividad deseada y, por lo tanto, revolucionar la planta de producción. Así, la clave para construir la fábrica del futuro es una transformación de lo analógico a un ecosistema de tecnología de extremo a extremo que unifica voz, video, datos y analítica en una sola plataforma de comunicación.
Con esta migración, es posible aprovechar todo el potencial de los servicios de voz, datos, GPS, mensajes de texto, Bluetooth, Wi-Fi y video para una coordinación en tiempo real y una administración de trabajo más eficiente y segura a través de la detección, comunicación, análisis y respuesta a lo ocurrido dentro de la planta.
En una fábrica, la detección, la supervisión de puntos de acceso y el monitoreo externo e interno son clave para mantener un espacio seguro. La video seguridad integrada, a través de inteligencia artificial, da una mejor visibilidad del entorno gracias a la tecnología especializada utilizada tales como las cámaras de visión amplia, las cámaras ojo de pez y sensores múltiples.Por su parte, el control de acceso permite gestionar la entrada tanto de vehículos y personas a través de reconocimiento de placas de vehículo, alertas de listas de control y reconocimiento facial.
Sin embargo, no basta con monitorear, hay que tener la capacidad de analizar la información que se genera. La video analítica, que detecta cada movimiento en todas las instalaciones, ayuda a identificar actividades potencialmente sospechosas o peligrosas, llevando la atención a áreas que llegan a tener movimientos inusuales, aumentando la eficiencia y mejorando los tiempos de respuesta al evaluar una situación que podrían generar un riesgo operativo o de seguridad.
También se pueden integrar las tarjetas de identificación a esta tecnología para poder encontrar al personal de manera más rápida en las instalaciones al hacer un rastreo de las mismas mediante la actividad registrada por el mismo empleado.
Ya sea una sesión de rutina con el personal o un equipo de respuesta frente a una emergencia, la comunicación clara y oportuna es clave. Es por eso que se requiere de radios profesionales de dos vías seguras, confiables y asequibles con características como la ausencia de la estática, la distorsión del ruido de fondo típicos de las comunicaciones de radio y baterías más duraderas para un flujo de trabajo ininterrumpido.
Dentro de la línea de producción, se pueden resolver los problemas rápido y reducir tiempos de inactividad con los radios digitales intrínsecamente seguros, audio totalmente claro y el uso de llamada selectiva para coordinar al personal sin interrumpir las actividades del resto. Existe, además, la posibilidad de enviar detalles por texto, foto, video o archivo adjunto a smartphones, tablets, laptops e incluso teléfonos fijos.
Una respuesta ante incidentes y/o problemas dentro de la fábrica es posible siempre y cuando se esté preparado y con la información necesaria en tiempo real. Por ejemplo, cuándo se dispara una alarma en la línea de montaje que necesita la atención de los operadores, este ecosistema completo permite enviar la alerta a tiempo o bien si una máquina se detiene, se puede conocer el estado de la máquina que presentó fallo y enviar órdenes de trabajo para asignar tareas a la persona correcta.
Por último, se puede proteger a los trabajadores de primera línea con alertas de trabajador accidentado, garantizando que no haya errores de interpretación en las líneas de producción con una inmejorable calidad de audio.
En conclusión, en la fábrica del futuro se debe promover un entorno de trabajo seguro, productivo y eficiente y las soluciones basadas en tecnología diseñada y construida con la robustez necesaria para adaptarse a las condiciones operacionales más exigentes, son indispensables para lograr una nueva revolución industrial que invita a los líderes de la industria a combinar innovaciones tecnológicas y tecnología operacional para crear valor en nuevas y diferentes formas.
Por Darío Mojica, experto en comunicaciones empresariales de Motorola Solutions.