Francisco Paoltroni, Juan Ignacio de Hagen y Roberto Schulz invirtieron en 2021, 100 millones de pesos en Ibarreta, provincia de Formosa, para instalar una planta extrusora de soja. Sin embargo, aún no pudieron ponerla en funcionamiento debido a que se les niega la provisión de energía eléctrica, a pesar de haber cumplido los trámites requeridos.
A raíz de esta situación, presentaron un recurso de amparo ante los organismos judiciales con la esperanza de comenzar a funcionar lo antes posible.
Para conocer más de este tema, Ser Industria Radio dialogó con Paoltroni, quien además es productor agropecuario y aspira a disputar la gobernación formoseña en las próximas elecciones.
El empresario se expresó sobre las dificultades que enfrentan en Formosa los emprendimientos privados e hizo referencia a las posibilidades de dar un fuerte impulso a la producción agropecuaria y al servicio de transporte ferroviario.
¿En qué situación se encuentra actualmente la planta de soja?
Hago un repaso. El año pasado emprendimos esta empresa, porque Formosa tiene muy poca producción de soja, producto de las grandes distancias y un clima un poco más adverso y a su vez es importadora de expeller. Vimos la oportunidad de procesar soja en forma local e impulsar la producción en la provincia. Así fue que empezamos a construir la planta, con una inversión inicial de 100 millones de pesos, que hoy, a moneda constante son 150 millones por la inflación. Tuvimos la aprobación de Repsa, empresa de energía, el 13 de octubre y nos indicaron cómo teníamos que hacer la obra, bajo que normas, con qué insumos. Concretamos todas esas etapas, tuvimos aprobación del proyecto de factibilidad y el 30 de junio de este año teníamos la fecha coordinada para conectar el suministro. Incluso se había informado en algunas FM locales de los pueblos aledaños, que se haría un corte del servicio para conectarnos, pero de un momento a otro, suspendieron todo, sin motivo aparente. Entendemos que hay una cuestión política de fondo, pero sin lugar a dudas, no están cumpliendo con las normas y la ley.
¿Su candidatura a la gobernación puede ser el motivo?
Esto pasa en la provincia desde hace muchos años. Aquí se puso en marcha la máquina de impedir y cada vez que uno tiene que ir ante el Estado se encuentra con todas las trabas para que los emprendimientos no prosperen. Formosa tienen 48 empresas cada 10 mil habitantes, el Chaco, nuestro vecino, tiene 130, el triple, cada 10 mil habitantes. Se impide a los emprendedores evolucionar en sus proyectos. Lo mismo pasa con los títulos de propiedad de los campos, terrenos o casas. En Formosa, por ser una provincia joven, hay muchísimos terrenos en campos fiscales y no transfieren el dominio.
¿Los emprendedores logran superar las dificultades o dejan de lado los proyectos?
No se puede avanzar porque la producción agrícola ganadera requiere inversiones muy grandes y sin título de propiedad no hay garantías jurídicas. Nadie compra un auto sin papeles, lo mismo pasa con un campo. El sector agropecuario pudo avanzar y evolucionar tanto en casi todo el país excepto en Formosa. Estamos perdiendo unos 18 años de desarrollo. Por eso tenemos estos niveles de pobreza, la dependencia del estado municipal, provincial y nacional en la población formoseña, dado que no se genera empleo privado.
¿Qué cantidad de puestos de trabajo, directos e indirectos, podría generar la planta?
Está generando cinco puestos, mandamos a los chicos a capacitarse a Santa Fe, a una planta de las mismas características, para tener el equipo de trabajo conformado cuando estemos operativos. Y rápidamente se puede duplicar el empleo, que tiene un potencial futuro de hasta 40 personas. Quiero hacer hincapié en que esta PyME tiene la particularidad de potenciar a otras 50 PyMEs que ya están en Formosa, porque interactúa como compradora de porotos de soja y vendedora de expeller, ya sea para las dietas de animales, producción de carne, leche, cerdo, pollo, vacunos, huevos. Es la proteína vegetal que compone todas las dietas animales. Formosa compra todo en otras provincias. Esta PyME va a potenciar y unificar las dos grandes cadenas del sector privado, la agrícola y la ganadera. La provincia tiene 80 mil hectáreas que se están sembrando, pero cuenta con un potencial de 2 millones de hectáreas. Cuando uno piensa en todo eso, se pregunta ¿cómo puede haber pobreza en Formosa? Únicamente implementando un plan para que no se genere empleo.
¿Es lo que pretende cambiar?
Exacto. Hace 30 años. aquí se perdió el algodón, hubo un avance en la tecnología que hizo que se produzca de una manera diferente. En Formosa se reemplazó el trabajo en el algodón con planes sociales, esa es la pobreza permanente.
¿Cuál es la actitud de la sociedad y de los otros empresarios ante los impedimentos al desarrollo de la actividad privada?
Estamos en un momento donde hay un despertar de la conciencia, donde hemos desnudado varias realidades. En 30 años se fueron 120 mil formoseños a diferentes puntos del país en busca del trabajo que aquí no se les da. Desnudamos esta realidad de que este sistema ha sido excluyente y que la falta de trabajo termina dividiendo a las familias. Hoy, con la crisis, todos toman nota de que tenemos que buscar un camino diferente.
El gobierno dijo que se redujo el empleo público en la provincia. ¿Es así?
No se le puede creer nada a las estadísticas oficiales. Hay contratados, empleo informal… No se puede creer en los datos y las estadísticas que ofrece el gobierno.
¿Qué medidas deberían tomarse para dar vuelta esta situación?
El despegue viene sobre dos columnas vertebrales: el sector agropecuario, que tiene ese potencial de 2 millones de hectáreas agrícolas y la posibilidad de tener 4 millones y medios de cabezas. Hoy estamos en un tercio, 1.500.000. La otra gran herramienta de desarrollo y progreso es el tren. El tren formoseño tiene unas posibilidades increíbles. En una primera etapa, para hacer un desarrollo con todos los pueblos del interior. En Formosa no se puede mejorar la salud, la educación, la recolección de residuos, ni absolutamente nada, porque tiene un suelo en el que no se puede ni caminar cuando llueve. Realizamos un estudio, que concluye en que se pierden 30 días de clases por barro. Entonces, todo arranca a partir de mejorar el acceso y eso lo vamos a hacer con tren. Formosa tiene en Salta una punta del riel, la piedra y la otra punta, el río Paraguay, allí la arena. Entonces vamos a poner el tren a trabajar en los 8 o 10 años y en ese periodo ya tendremos un desarrollo agrícola muy fuerte, dónde vamos a contar con el tren para tener transporte muy competitivo. Yendo un poco más lejos, si uno mira el mapa, Formosa es el corazón del MERCOSUR. El tren formoseño automáticamente tomaría todas las cargas de contenedores al Paraguay y podría sacarlas al Pacifico, a los puertos chilenos, para ir a los países del sudeste asiático, ganando 14 días en el transporte. En Argentina somos 47 millones de habitantes y podemos alimentar a 600 millones de bocas. Naturalmente podemos dar de comer a otros lugares del mundo. Nadie puede generar alimentos en cantidad, calidad y bajo costo, como nuestro país.