El gobierno de Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur, firmó un acuerdo con la multinacional CWP Global para generar una agenda común que permita identificar y evaluar la factibilidad de desarrollo de proyectos de energías renovables, apalancadas en la tecnología eólica y la producción de hidrógeno. Precisamente se trata de las áreas donde desataca la experiencia que tiene la compañía en distintos mercados globales.
El proyecto incluirá plantas de generación de energía eólica, electrólisis, desalinización de agua y amoníaco. También toda la infraestructura de apoyo para el procesamiento, la producción industrial y la exportación, incluidas carreteras, puertos y servicios vinculados, según lo que planteó la propia empresa.
Representantes de la compañía se reunieron con el gobernador Gustavo Melella y desde el gobierno fueguino destacaron que esta instancia permite empezar a trazar los lineamientos para “el desarrollo del hidrógeno verde con el grupo empresarial más grande del mundo que desarrolla este tipo de proyectos”.
Aprovechando la trayectoria en parques eólicos a escala, la empresa asegura estar desarrollando ocho centros de hidrógeno verde de gran escala en todo el mundo, con una capacidad combinada de energía renovable que supera los 200 GW.
Tierra del Fuego tiene actualmente un mix energético que se basa íntegramente en combustibles fósiles. Sin embargo existe un gran potencial sin explotar para otras tecnologías de fuentes renovables que permitirán una diversificación, en particular a partir de la disponibilidad de zonas de vientos considerados excepcionales.