Según el informe elaborado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC), en enero de 2025, la industria argentina utilizó el 55% de su capacidad instalada, superando levemente el 54,6% registrado en el mismo mes de 2024. A pesar de esta mejora, persisten diferencias significativas entre los distintos sectores productivos.
Entre los sectores que mostraron mayores niveles de utilización se encuentran la refinación del petróleo, con un 84,6%, seguido por papel y cartón (67,3%), sustancias y productos químicos (66,0%), productos alimenticios y bebidas (61,0%) e industrias metálicas básicas (59,3%).
Por el contrario, algunos sectores aún operan muy por debajo del promedio general. Tal es el caso de edición e impresión (52,1%), productos minerales no metálicos (43,3%), productos del tabaco (40,8%), productos de caucho y plástico (39,6%), metalmecánica excepto automotores (38,1%), industria automotriz (34,8%) y productos textiles (33,9%).
Factores que impulsaron el uso de la capacidad instalada
Las principales incidencias positivas se registraron en la elaboración de sustancias y productos químicos, que alcanzó un 66,0% de utilización, frente al 57,1% del año pasado. Este crecimiento se debe a un mayor nivel de producción de materias primas plásticas y productos químicos básicos. Además, el polo petroquímico de Bahía Blanca, que en enero de 2024 se había visto afectado por un corte de energía tras el temporal de diciembre de 2023, pudo operar con normalidad este año.
Otro sector con un avance destacado fue el de productos alimenticios y bebidas, que pasó del 57,7% en enero de 2024 al 61,0% este año, impulsado principalmente por el aumento en la molienda de oleaginosas.
También se registraron mejoras en la metalmecánica excepto automotores, que alcanzó un 38,1% frente al 33,4% del año pasado, gracias a una mayor fabricación de maquinaria agropecuaria y aparatos de uso doméstico. En el mismo sentido, la industria automotriz mostró un incremento, con una utilización del 34,8% frente al 25,7% de enero de 2024, debido a un aumento en la producción de vehículos.
En cuanto a la refinación del petróleo, el sector alcanzó un 84,6% de utilización de la capacidad instalada, por encima del 83,5% registrado en enero del año pasado, como resultado de un mayor nivel de procesamiento de crudo.
Industria metalúrgica, el sector más afectado
En contraste con las mejoras en diversos sectores, las industrias básicas del acero mostraron la principal caída interanual. En enero, el nivel de utilización de la capacidad instalada se ubicó en 59,3%, muy por debajo del 76,3% registrado en el mismo mes de 2024.
De acuerdo con los datos disponibles, esta reducción está relacionada con la caída del 26,5% en la producción de acero crudo, lo que ha impactado en la actividad del sector.
A pesar del repunte en algunos rubros, la industria argentina todavía opera con un margen de capacidad ociosa del 45%. El comportamiento dispar de los sectores refleja el impacto de distintos factores, desde la demanda interna hasta el desempeño de la economía y el acceso a insumos clave para la producción.